+52 
Contacto@agronorman.com
En mi caminar por el campo, entre lo heterogéneo de las unidades de producción agrícolas, me he encontrado con una característica que comparten productores de diferentes estratos y cultivos, que es que:
Permanentemente están preocupados, enfocados y DEPENDIENTES de encontrar las mejores ventanas de mercado para que sus productos agrícolas se vendan al mejor precio posible.
Bolsa de futuros de Chicago
¡El precio es el factor que menos pueden controlar los agricultores!
Tanto si cultivan productos de alta rentabilidad por hectárea tales como:
Agave, Aguacate, Berries, olivo, Nuez, etc.
Como los de cultivos de grandes extensiones:
Maíz, Frijol, Trigo, Caña, Plátano, etc.
Todos están envueltos en la misma dinámica de la ventana de precio de mercado, encomendándose a que:
-Le caiga helada a los vecinos para que el producto suba de valor.
-Que no les cierren la frontera por temas de sanidad o inocuidad.
-No les Ching** el crimen organizado los camiones de camino a su destino
– No suba mucho el precio de la energía y los insumos agrícolas.
Y si hablamos de las hortalizas siguen el mismo patrón, pero con una dinámica algo diferente, ya que los productores van persiguiendo el sueño del buen precio de mercado siguiendo las recomendaciones o los éxitos de sus vecinos de campo.
Es decir que si un año la mayoría cultivaron tomate y el precio no fue bueno, pero ese mismo año algunos pocos cultivaron pepino y les fue bien ¿Qué pasa el siguiente año? La mayoría se cambia al pepino y los que ganan son los que siguieron o se cambiaron a sembrar tomate.
Pero es evidente que ordenar el mercado a gran escala es bastante difícil y cada productor toma sus propias decisiones en función de lo que el cree que es lo mejor para su negocio.
El buscar el ansiado mejor precio de mercado es sin duda una preocupación necesaria, sería incongruente que, de acuerdo con las leyes de oferta y demanda, al productor este tema no le importara.
Pero… lo que pocas veces encuentro, es a productores que estén preocupados de fondo en lo que creo son las preguntas cruciales que debería hacerse
¿Cuánto estoy desperdiciando durante el ciclo de cultivo?
¿Cuánto margen estoy perdiendo en productividad?
"Lo que no se define no se puede medir. Lo que no se mide, no se puede mejorar. Lo que no se mejora, se degrada siempre".
También es general el que al productor le preocupa el precio de los insumos, claro que todos quieren gastar menos en el proceso productivo.
Pero pocos quieren invertir en soluciones tecnológicas integrales que, en el corto, mediano y largo plazo,
le permitan visibilizar dónde están las fugas de capital que están mermando su rentabilidad y soluciones para aumentar su productividad.
En todos los casos, con los productores innovadores que le han abierto la puerta a la Agricultura Cognitiva, nos encontramos con las siguientes coincidencias al analizar con datos permanentes y en tiempo real su proceso productivo.
1.- Exceso de sales en la solución del suelo
2.- Excesos o carencias nutricionales de acuerdo con su objetivo de producción.
3.- Gasto excesivo de agua y por ende de energía eléctrica.
4.- Nulo registro de datos climáticos para la toma de decisiones de bioestimulación o bioregulación del cultivo.
5.- Manejo de plagas por calendario, con aplicaciones excesivas que generan toxicidad y gasto innecesario.
Todas estas problemáticas que por lo general encontramos, generan:
-Mayores gastos en insumos
-Desperdicio y contaminación
-Pérdida de productividad por hectárea
-Menor valor de los productos en el mercado
Y todo esto, en parte, por influencia del mercado de insumos agrícolas que esta inflado y que comento en esta entrada del blog: ¿Escuelas de agronomía convertidas en un semillero de vendedores de insumos?
Claro que por todo esto es evidente que el productor necesite encontrar un super precio de mercado para que estas deficiencias en la administración de su campo queden opacadas en el resultado económico final.
Pero idolatrar al precio de mercado como este “Dios” salvador es muy peligroso, y lo estamos viviendo todos con la super inflación que estamos viviendo, la cual se va a acrecentar con los riesgos de guerra y con la inestabilidad de los mercados.
Nosotros sostenemos que “La productividad agrícola debe sustentarse en el conocimiento de la PASTA”, te invitamos a reflexionar y responder las preguntas en este texto planteamos.
¿Cuánto estoy desperdiciando durante el ciclo de cultivo?
¿Cuánto margen estoy perdiendo en productividad?
Si nos permites, ¡podemos ayudarte a encontrar las respuestas!
José Raúl Martínez Trejo Luna
Mercagronomo y Maestro en Finanzas
Director operativo NORMAN Agricultura Cognitiva
Correo: Raul@agronorman.com
Whatsapp: 333-477-15-68
